Hay muchas razones por las que es mejor dejar nuestros coches bajo refugio en lugar de aparcar en la calle. Sobre todo para largos periodos. Disponer de una plaza de garaje o de un abono de parking es siempre la mejor opción. Especialmente en verano, cuando se dan una serie de razones que acentúan la necesidad de dejar nuestros vehículos bajo cubierto.
Por qué no es buena idea aparcar en la calle en verano
El primer motivo que se nos puede venir a la cabeza para evitar aparcar en la calle durante el tiempo estival es por las altas temperaturas. Pero ¿conocemos todas las consecuencias que puede provocar el calor excesivo a nuestros vehículos? Y no solo el calor puede ser perjudicial para nuestro coche, hay más motivos.
Robos
Los vehículos aparcados al aire libre están siempre expuestos a la acción de los ladrones. Pero en verano las grandes ciudades suelen quedarse más vacías. El éxodo a los destinos vacacionales hace que aumente el peligro de robo en las urbes más pobladas, ya que los cacos aprovechan esta situación para robar no solo en casas, también en coches. Además, suelen estar atentos a los movimientos de los ciudadanos para saber cuándo abandonan sus ciudades para irse de vacaciones. En 2020, el 25% de los robos en el interior de los vehículos fue en verano.
Si viajamos en transporte público o simplemente dejamos atrás nuestros segundos vehículos, es importante tener en cuenta estos datos. Si no disponemos de garaje, una opción viable a aparcar en la calle puede pasar por comprar un abono en un parking para que nuestros vehículos descansen seguros durante las vacaciones.
Vandalismo
Nuestros coches también están en verano más expuestos a ser dañados de forma voluntaria, ya que los vándalos encuentran mayor seguridad al ver las calles más vacías. También pueden sufrir arañazos o golpes involuntarios, sobre todo cuando los dejamos en zonas muy concurridas o masificadas, como suelen ser los destinos vacacionales. Una vez más, el parking vuelve a ser la mejor opción, tanto para estancias largas como más cortas, en este caso.
Altas temperaturas
Con veranos como el actual en el que ciudades de toda España están superando los 40 grados, aparcar en la calle puede suponer un gran riesgo. Con estas temperaturas, el exterior del vehículo puede alcanzar hasta los 80 grados. Esto puede deteriorar la carrocería y provocar daños en las bujías, el filtro del aire y los neumáticos. Además, puede ocasionar graves quemaduras. También es peligroso acceder al interior del coche en estas circunstancias. Se pueden producir mareos por el cambio brusco de temperatura y hay algunos elementos, como los enganches de los cinturones, que también pueden quemarte.
El principal consejo es utilizar un parasol para evitar la entrada directa del sol en el interior del coche, además de proteger el volante con una funda. También es importante ventilar el coche antes de arrancarlo, para que baje la temperatura gradualmente antes de encender el aire acondicionado.
Buscar un lugar en la sombra puede ser complicado y no siempre una buena idea. Sobre todo si lo dejamos en una zona arbolada, donde el vehículo queda expuesto a la resina de los árboles, al polen y a los excrementos de los pájaros.
Inclemencias meteorológicas
Aunque el verano es la estación más seca, especialmente en la mitad sur, hay que estar atento a posibles inclemencias meteorológicas ocasionales. Las conocidas tormentas de verano pueden venir acompañadas de granizo, que puede ocasionar graves daños materiales en los coches. A finales del pasado mes de julio, las zonas de Castellón y el sur de Cataluña sufrieron fuertes granizadas que abollaron decenas de carrocerías y destrozaron las lunas de los coches.
Además, exponemos nuestros vehículos a fuertes riadas que pueden ocasionarles graves daños. Es más, si estas tormentas van acompañadas de calima, también típica del verano, puede hacer que nuestros coches terminen completamente sucios. Por ello, es aconsejable estar al tanto de las predicciones meteorológicas durante esta época. Si vemos que se avecinan tormentas, es aconsejable no aparcar en la calle y buscar refugio para nuestros coches en un parking. En AUSSA ponemos fácil acceder a una plaza en tales circunstancias, ya que pueden hacerlo reservando a través de nuestra aplicación Apparkaya o nuestro portal de reservas.
